La mejor herramienta para combatir la pobreza, el hambre y la injusticia, es con la educación. Un pueblo educado, es un pueblo pensante que conoce sus derechos y los reclama. ADRA Honduras está comprometida con la educación de la niñez vulnerable sobre todo aquellos niños y niñas que viven en áreas rurales en condiciones de pobreza.
El programa ¨Niños de Esperanza¨ busca empoderar a cada niño y niña de comunidades postergadas, remotas, así como aquellas en zonas urbanas marginales a tener acceso a una educación básica y digna.